Por: Jesús Nova.
De forma definitiva el mundo político es muy complicado y aquella expresión, sabia de que en política 2 x 2 no es igual 4 es indudable y me explico, he podido ver como se hacen campañas publicitarias de un aspirante buscando posicionamiento o por el contrario queriendo llevar a un grupo importante de personas a que tengan la percepción de grandeza de un candidato o candidata.
Pasar por la Av. Máximo Gómez cerca de la John F. Kennedy y descubrir la grandiosidad de una estructura física para la campaña de un aspirante a ser el candidato de un partido y saber con la celeridad con la que se realizó esta obra habla claramente de muchas posibilidades económicas, eso es innegable.
Yo, con esta jodida maña de ser preguntón comencé a realizarme una serie de cuestionamientos como ¿Y porque tan rápido se construyó esto? ¿Qué motiva esta prisa? ¿Por qué ostentar tanto poder? ¿Cuáles son las motivaciones para que un pre - candidato haga una inversión tan grande, sin todavía ser oficialmente el representante electoral del partido en cuestión?
Entonces comenzaron a llegar algunas nuevas interrogantes a mi cabeza y me digo: la convención de este partido es en un par de meses, el otro precandidato fuerte dicen los estudios que está creciendo, los adversarios se mantienen firmes y con posibilidades de quedarse en el poder aunque tengan sus diferencias, esto dentro de algunas posibles explicaciones.
Existen muchas formas de expresar el temor y una de ellas es queriendo dar por descartado las posibilidades que pueda tener un contrincante electoral como es el caso, otra forma podría ser recordar eventos pasados de una gestión buscando crear una sensación de malestar en los electores y otra más sería, utilizar recursos económicos y poder mediático para intentar avasallar a su oponente.
Todas estas posibilidades existen, claro está, sin embargo todas estas formas pueden perfectamente dar un resultado contrario al que pueda estar esperando ese candidato y su equipo de campaña, sigo creyendo que las elecciones internas de un partido o de cualquier tipo de elección deben ganarse con propuestas, no con difamación. Y tener la conciencia de que en esos afanes politiqueros a final de cuentas la población votante y sobre todo la que no hace bulla, es la que realmente decide quién gana y quién pierde.
Creo yo que sabes tú a quien me refiero!
